Los ácidos grasos Omega 3 deben formar parte de cualquier dieta saludable, especialmente para la salud de los niños. Esto se debe a que desempeña un papel importante en su crecimiento y desarrollo, además de tener otros increíbles beneficios para su salud. Sin embargo, muchos padres llegan a desconocer sobre la seguridad de los suplementos de Omega 3 en sus hijos. Analiza los beneficios, efectos secundarios y recomendaciones dadas por expertos sobre el uso de suplementos de Omega 3 en niños.
¿Qué son los Omega 3?
Los Omega 3 son esenciales para la salud de todas las personas, llegando a ser importantes para el desarrollo fetal, la función cerebral, la salud del corazón y la inmunidad (1). Se consideran como esenciales debido a que nuestro cuerpo no los produce, si no que deben ser adquiridos de los alimentos.
Los ácidos grasos Omega 3 se dividen en tres tipos principales; el ácido alfa-linolénico, eicosapentaenoico y docosahexaenoico (mayormente conocido como DHA).
El ácido alfa-linolénico o ALA se puede consumir mediante el consumo de alimentos de origen vegetal (aceites vegetales, semillas, entre otros). Sin embargo, no participa como un elemento activo para el cuerpo, sino que se trasforma en sus formas activas, como el DHA y EPA, en cantidades muy limitadas ( 2 , 3).
Por otro lado, el EPA y DHA llegan a encontrarse en los pescados grasos como el salmón. También se encuentran disponible en una gran variedad de suplementos, siendo los más comunes los provenientes del aceite de pescado, krill y algas.
¿Cuáles son los beneficios del Omega 3 en niños?
La existencia de estudios parece indicar que el uso de suplementos de omega 3 parecen tener los siguientes beneficios para los niños.
Posiblemente ayude a mejorar los síntomas del TDAH
El TDAH (trastorno por déficit de atención con hiperactividad) es un mal que produce hiperactividad y dificultad para concentrarse en niños (4).
Es interesante conocer la existencia de investigaciones que indican que el uso de suplementos de omega 3 serían de mucha ayuda con el fin de combatir sus síntomas en niños.
Se puede mencionar que una revisión hecha a 16 estudios reveló que el omega 3 mejoro la memoria, el aprendizaje, la hiperactividad, entre otros problemas de comportamiento en niños. Síntomas que a menudo afectan a pacientes con TDAH (5)
Un estudio hecho a 79 niños durante 16 semanas señaló que el consumo de un suplemento de omega 3, a una dosis de 1300 mg al día, mejoró la atención en aquellos sujetos que tenían TDAH y también en quienes no padecían este mal (6).
También se puede mencionar que una gran revisión hecha a 52 estudios concluyó que la realización de modificaciones dietéticas y el uso de suplementos de aceite de pescado tuvieron resultados prometedores en la reducción de los síntomas del TDAH en niños (7)
Puede ayudar a reducir el asma
El asma, enfermedad crónica que afecta a niños y adultos, causa una gran diversidad de síntomas molestos, incluyendo dificultad para respirar, dolor en el pecho, sibilancias y tos. Se sabe gracias a varios estudios que el omega 3 es una posible solución para aliviar estos síntomas.
Un estudio hecho a 29 niños de 10 meses encontró que el uso de una cápsula de aceite de pescado, con aproximadamente 120 mg de DHA y EPA, fue útil para reducir los síntomas producidos por el asma (8).
Un resultado similar se tuvo en una investigación hecha a 135 niños. Se asoció un mayor consumo de omega 3 con una menor incidencia de síntomas producidos por el asma (9).
Promueve un mejor sueño
Existen niños que llegan a sufrir de alteraciones del sueño. Un estudio encontró que los niveles bajos de ácidos grasos omega 3 en sangre aumento el riesgo de padecer de problemas de sueño en niños. También se encontró que el uso de suplementos con 600 mg de DHA por 16 semanas ayudo a reducir las interrupciones y aumento en aproximadamente 1 hora el tiempo de sueño (10).
También se puede señalar una investigación que encontró que el consumo de una mayor cantidad de ácidos grasos omega 3 durante el embarazo mejoró los patrones de sueño en los bebés (11, 12)
Pese a la evidencia, aun son requeridos más estudios para encontrar la relación entre el omega 3 y el patrón de sueño en niños.
Mejora la salud del cerebro.
Los ácidos grasos omega 3 también parecen tener la capacidad para mejorar la función cerebral y el estado de ánimo en niños. Un estudio hecho a 183 niños de 6 meses señaló que aquellos que consumieron una mayor cantidad de omega 3 mejoraron su capacidad de aprendizaje verbal y memoria (12).
Otro estudio hecho a 33 niños relacionó el consumo de 400 a 1200 mg de DHA con un aumento en la activación de la corteza prefrontal. Esta es la región del cerebro responsable del control de impulsos, la atención y la planificación (13).
También se puede resaltar estudios que sugieren que el consumo de omega 3 puede ser un método preventivo para la depresión y otros trastornos anímicos en niños (14, 15, 16).
Posibles efectos secundarios
El uso de suplementos de omega 3 puede tener efectos adversos muy leves (17):
- Mal aliento
- Malestar estomacal
- Dolor de cabeza
- Acidez
- Náusea
- Diarrea
Es importante cerciorarse que su hijo siga las dosis recomendadas para reducir el riesgo de efectos secundarios. Algunos expertos también recomiendan iniciar con la dosis más baja e ir aumentando gradualmente con el fin de evaluar la tolerancia a estos suplementos.
Si sufre de alérgica al pescado o mariscos se debe evitar el uso del aceite de pescado y otros suplementos hechos a base de pescado. En su lugar puedes optar por otros alimentos ricos en omega 3 como la linaza o el aceite de algas.
La mayoría de estudios indican que el consumo de 120 a 1300 mg de DHA y EPA combinados llegan a ser beneficiosos para la salud del niño (18, 19). Sin embargo, con el fin de evitar cualquier reacción adversa, se debe consultar con un profesional de la salud sobre el uso de suplementos de omega 3 en su hijo.