Saber cómo reproducir una planta es importante para crear pequeñas plántulas, cultivar especies de forma económica y aumentar las posibilidades de tener una plantación exitosa.
¿No sabes cómo reproducir una planta? Aquí puedes ver cómo hacerlo usando dos métodos diferentes: corte de esquejes y siembra por semillas. ¡Sigue leyendo y descúbrelo!
¿Cómo reproducir una planta por esquejes?
En este caso estamos extrayendo una parte viva extraída de la planta, generalmente un tallo. Esa parte se injertará en otra o se plantará en el suelo para que se desarrolle.
¡El método de reproducción por esquejes es bastante simple! A continuación, te indicamos cómo funciona y cómo hacerlo en unos pocos pasos.
- Elija la parte de la planta que se cortará para hacer el esqueje. Se recomienda seleccionar un tallo blando o una rama nueva, que sea más maleable. Si es posible, elija una parte que tenga al menos cuatro brotes u hojas nuevas;
- Corta el tallo o la rama suavemente con unas tijeras de podar o de jardín. Si haces un corte en la base de la rama, debe ser horizontal. Si está al final, debe ser diagonal. La parte cortada no debe tener más de 20 centímetros;
- Retire las brácteas inferiores y los capullos de flores;
- Aplique una solución de agua y fertilizante líquido al corte. De esta forma, aumentará su cantidad de nutrientes, contribuyendo a su crecimiento;
- Prepara la maceta para cultivar el esqueje. Se recomienda ponerle sustrato ideal para la variedad, utilizando tierra y arena lavada a partes iguales. Dependiendo de la especie, también puedes usar solo agua. Si es posible, elija un recipiente transparente, para visualizar fácilmente la formación del sistema radicular;
- Coloque la parte cortada del esqueje en el sustrato, hundiendo de tres a cinco centímetros;
- Hacer el primer riego y añadir agua diariamente durante la primera semana, cuidando siempre mantener la tierra húmeda y no empapada;
- Mantén la maceta o recipiente en un lugar con iluminación indirecta y ventilación moderada. No se puede mover durante al menos 10 días.
Un punto importante sobre la propagación por esquejes es que esta técnica no se puede realizar en todas las plantas de tu jardín. Se recomienda hacer una prueba y, si no genera resultados, la especie no es apta para la reproducción por esquejes.
En general, los esquejes funcionan bien con plantas como geranios, rosas, begonias, lavandas, clavos, dalias, suculentas, árboles y arbustos.
Después de los 10 días iniciales, intente ver si el corte ya tiene raíces aparentes en el fondo o los lados del recipiente. Si es así, ya es posible realizar el trasplante.
¿Cómo propagar una planta por semillas?
La reproducción por semilla también es un proceso simple. Se puede realizar por siembra directa (cuando se planta en el lugar de cultivo definitivo) o por siembra indirecta (es necesario trasplantarla al lugar de cultivo definitivo).
Si bien existen dos métodos de siembra, son idénticos, la única diferencia es que en la siembra indirecta se utiliza un semillero para luego trasplantar la plántula. Vea un paso a paso para reproducir plantas por semillas:
- Elija las semillas para el cultivo. Deben estar sanas y sin imperfecciones. Lo ideal es comprar semillas seleccionadas listas para el cultivo;
- Prepara el suelo para plantar la semilla. Se recomienda utilizar tierra vegetal y abono orgánico de calidad, como el humus de lombriz. Mezcle 1/3 de compost y 2/3 de tierra;
- Planta las semillas. Para hacer esto, cava un hoyo de dos a tres centímetros de profundidad en la tierra. Dependiendo de la variedad, coloca de dos a cuatro semillas en el hoyo. Cubre el hoyo con tierra, formando una capa delgada sobre las semillas;
- Realizar el primer riego, poniendo agua en abundancia. Realizar riegos diarios en la primera semana, sin exceso de agua, solo para mantener la tierra húmeda. Use una botella de spray para un mejor control del líquido.
Si plantas la semilla en un macetero, se recomienda guardarla en un lugar con luz indirecta y temperatura agradable. Sin extremos, es decir, sin climas demasiado cálidos o demasiado fríos.
Si se planta en un semillero, es necesario trasplantarlas a un macetero o lugar definitivo cuando la plántula alcance los 10 a 15 centímetros. Por lo general, esto sucede entre 30 y 50 días después de la siembra.