Echinocactus grusonii o Asiento de suegra – Cuidados y propagación

Ayúdanos compartiendo!

Dentro de la inmensa familia de los cactus, el Echinocactus grusonii es una variedad apreciada por su belleza, pero que se debe adquirir únicamente en los lugares autorizados para su venta, ya que su depredación en la naturaleza ha producido que esté en peligro de extinción. Aprende a cuidar esta variedad, también conocida como asiento de suegra o cactus balón.

Guía de cuidados del Echinocactus Grusonii o asiento de suegra

Esta planta se caracteriza por ser grande, redondeada y espinosa. Aparte de su llamativa figura, puede asombrar a muchos por su gran tamaño, ya que, en espacios favorables, el Echinocactus grusonii incluso puede llegar a medir hasta 1 metro de diámetro.

A pesar de su gran belleza, y de que es de los cactus más populares, al igual que la rebutia y el nopal, actualmente se encuentra en peligro de extinción, siendo la venta ilegal de esta planta una de las muchas causantes de este hecho. Llegando a ser importante que adquiramos esta planta en un lugar que ha sido aprobado para su venta y que busque preservar estas variedades en su medio natural. Asimismo, debemos evitar sacar este cactus de su habitad natural para poder preservarla.

Características principales del Echinocactus grusonii

Proveniente de México, el asiento de la suegra pertenece a la familia albispinus, destacando entre los muchos cactus que existen debido a su gran tamaño, color verde y espinas alargadas.  Si bien estos cactus pueden llegar a crecer descomunalmente, para llegar a su máximo tamaño puede tardar más de 100 años.

Esta especie de cactus desarrolla flores que pueden medir entre 5 a 7 cm. Sin embargo, estas flores no duran demasiado, disfrutando de su presencia por tan solo 3 días. Es más, solo florecen los especímenes adultos, lo cual suele suceder a los 15 años de vida, cuando las condiciones de crecimiento sean óptimas. Es por esta razón que se cultivan principalmente por su belleza.

Cuidados para el Echinocactus grusonii

Toda planta necesita de cuidados, incluso los cactus. Así que no te olvides de tu planta y bríndale el trato que necesita para crecer adecuadamente y durar muchos años.

Clima, Iluminación y Ubícacion

El Echinocactus grusonii adulto deberá estar ubicado en una zona donde pueda tener acceso a la luz solar directa. No obstante, en sus primeras etapas de vida debe estar a semi sombra, por lo que mientras crece deberás ir acostumbrándola a la luz solar directa. No la expongas inmediatamente o se quemarán rápidamente.

Asimismo, si vives en una zona donde el calor es excesivo, se recomienda ubicarla en un lugar donde no reciba la luz solar más cálida, usualmente iniciada al medio día, para evitar quemaduras.  En el invierno, no tolerará temperaturas que bajen de los 5º C.

Sustrato y maceta

En caso de plantar el Echinocactus grusonii en una maceta, deberás utilizar una mezcla conformada por 1 parte de sustrato universal, 1 parte de grava volcánica de grano pequeño y 1 parte de arlita (también conocida como arcilla expandida) o pomice.

La maceta no debe ser demasiado grande, ya que se trasplantará cada dos años. El tamaño debe ser ligeramente superior al tamaño del asiento de la suegra. Siendo una planta que prefiere crecer en macetas de barro que sean bajas y anchas.

Es importante que debajo de la maceta no coloquemos ningún plato o recipiente que mantenga el agua. Asimismo, se colocará una capa de piedra pómez al final de la maceta para mantener el drenaje. Sobre el sustrato también se recomienda colocar una capa de grava o pequeñas piedras para favorecer su crecimiento y darle un toque más ornamental.

Los jardineros más experimentados prefieren ubicar el echinocactus grusonii en los jardines exteriores, donde tendrán un espacio amplio para crecer libremente.

Frecuencia del riego

La frecuencia del riego dependerá exclusivamente de la estación, en verano se debe regar una o dos veces por semana, dejando que se seque el sustrato. En el invierno, el riego se suspenderá para evitar que el suelo se congele y la planta muera. En las otras estaciones, se puede regar cada 10 o 15 días.

Abono

La mejor manera de asegurar la salud de nuestros Echinocactus grusonii es nutrirlo con un abono especial para cactus que puedes adquirir en cualquier tienda de jardinería. Se recomienda utilizar abonos líquidos en el agua de riego cada 3 semanas, únicamente durante la primavera y el verano.

Propagación de Asiento de suegra

¿Cómo sembrar el Echinocactus grusonii?

La siembra de semillas de Echinocactus grusonii toma su tiempo, y al desconocer la procedencia de las mismas podemos estar sembrando una variedad diferente. Algo importante a tener en cuenta, ya que pasará hasta 1 año para que el asiento de la suegra brote y sea lo suficientemente fuerte para ser trasplantado a su lugar definitivo.

Una aventura que a muchos les puede gustar, pero también hay quienes no les agrada la espera, pudiendo optar por adquirir una variedad ya desarrollada. En caso de querer germinar sus semillas, sigue los siguientes consejos:

En un recipiente que tenga huecos de drenaje debes colocar una capa de piedras pequeñas o piedra pómez, la cual ayudará a mantener el drenaje. Sobre esta capa, se coloca un sustrato compuesto por 1 parte de tierra de hoja y 1 parte de arena. 

Sumerge completamente la bandeja en un recipiente con agua, retíralo y deja escurrir muy bien el agua sobrante. Ahora, coloca las diminutas semillas del Echinocactus grusonii uniformemente en el sustrato, y con la ayuda de un colador esparce una ligera capa de sustrato, proceso que evitaría que las semillas se hundan demasiado.

Se necesita asegurar que el sustrato permanezca húmedo y bajo una temperatura estable, cubriendo la bandeja con papel film. Una vez colocado el papel film, ubica la bandeja en un lugar iluminado, pero no bajo luz solar directa para evitar que se quemen.

Es importante que diariamente retires el papel film para asegurarte de que la humedad y la temperatura permanezcan en buenas condiciones.

Una vez los primeros brotes comiencen a aparecer, generalmente a los 15 días, aunque puede tardar más, retira el plástico y lleva el recipiente hacia un lugar con un poco más de luz. No debe tener luz directa, porque entorpecerás el crecimiento.

Luego de la germinación del Echinocactus grusonii, elimina con mucho cuidado los brotes en mal estado para que los brotes sanos y fuertes tengan más espacio.

Una vez las plantas sean lo suficientemente desarrolladas, usualmente al año, se pueden trasplantar a macetas individuales.

Hijuelos

Los hijuelos salen alrededor de los echinocactus adultos, usualmente a los 15 años de vida. El proceso es simple, solo debes retirar los hijuelos y plantarlos en una maceta con el sustrato indicado. Es importante que coloquemos la maceta bajo mucha iluminación, sin embargo, no expuesto a la luz solar directa, ya que cuando son pequeñas necesitan acostumbrarse paulatinamente a la radiación directa para que no se quemen.

Adquisición y trasplante de Echinocactus grusonii

Si has decidido comprar un asiento de suegra ya establecido, se recomienda buscar alguno que este libre de hongos y plagas en una tienda especializada, observando muy bien las espinas, donde usualmente se esconden los insectos.

El proceso de trasplante es simple, solo se debe dejar secar el sustrato por unas dos semanas. Una vez se haya secado, con la ayuda de unos guantes de jardinería, esencial para que las espinas no nos lastimen, retira el asiento de suegra girando la maceta, cuidando de no dañar el cepellón.

En la nueva maceta coloca una rejilla en el agujero e incorpora 3 centímetros de piedras pómez para mejorar el drenaje. Se ubica el Echinocactus grusonii en el centro, y se rellena los alrededores con el sustrato previamente indicado. Finalmente, recuerda que el primer riego debe ser abundante.

Plagas y enfermedades del Echinocactus grusonii

No está exento de sufrir de enfermedades y distintas plagas, principalmente la Cochinilla algodonosa. Esta plaga se caracteriza por crear manchas blancas similares al algodón por todo el cactus. Son muy fáciles de identificar, sobre todo por el escudo protector blanco. Se retiran fácilmente con la ayuda de una tijera desinfectada, así que no será gran problema identificarla.

El Echinocactus grusonii no puede combatirlas por sí sola, así que deberás aplicar un producto especializado en esta plaga, el cual deberás adquirir en un vivero especializado.


Ayúdanos compartiendo!