Estás sintiendo que los golpes de calor del verano son suficientes para freír un huevo en la acera, ¿Te imaginas lo que esto le hace a tu planta? Si este es tu caso entonces es importante que intensifiques los cuidados de tu cultivo. Si te preguntas ¿Cómo proteger a tus plantas del calor?, ¿Cuánto debería aumentar su riego? O ¿Qué cuidados tener para los golpes de calor?, sigue leyendo esta nota para aplicar ciertos consejos para mantener seguras tus plantas durante las altas temperaturas.
Tabla de Contenido
¿Cómo proteger a tus plantas del calor?
Entre los cuidados que debemos tener en cuenta para evitar el calor afecte a tus plantas incluyen:
Riego
Al momento en que las temperaturas suben, seguramente te sirves un buen vaso de té frío y te acercas al aire acondicionado, pero hay algo que puede que te estés olvidando y es como afecta el calor a tus plantas. No olvides que el calor que tú estás sintiendo también las plantas lo sienten.
Un riego adecuado es sumamente importante durante las olas de calor para evitar que tus plantas llenas de vida se trasformen en secas hojas de coloración marrón.
Seguramente te surgirá la duda de cuál es la cantidad de agua que debes utilizar. Sin embargo, las necesidades de agua durante el calor del verano pueden variar dependiendo de la planta, el lugar, la temperatura del aire y el tipo de suelo. Asimismo, las plantas que crecen en macetas son otro factor a tener en cuenta.
Afortunadamente, las plantas son capaces de dar señales sobre si no estamos realizando un riego adecuado. Algunas claras evidencias son:
- Su planta está bien por la mañana, pero a media tarde se le nota decaída o descolorida.
- Si tienes un huerto que crece constantemente, pero que detiene su crecimiento sin razón alguna.
- Notas que se está secando por completo la tierra de tus macetas debido al calor.
Sin importar la herramienta o el sistema de trabajo que estés usando para regar, si quieres proteger a tus plantas del calor debes ser constante. También es importante no mojar las hojas y se debe evitar realizar los riegos bajo luz solar directa.
Si deseas determinar la cantidad de agua a utilizar, existe una manera fácil de averiguar cuánta agua necesitas. Este método consiste en aplicar un primer riego con el agua que creas necesaria, dejando que repose por 30 minutos. Una vez cumplido el tiempo debes excavar un hoyo de 20 cm de profundidad. Si notas que el suelo está húmedo, más no encharcado o seco, tienes la cantidad necesaria. En cambio, si está seco, será necesario regar más; en caso de estar mojado, reduce el riego y mejore el drenaje para tener unas plantas saludables.
Utiliza mantillo
El mantillo no solo es un producto importante para proteger del frío invernal, sino también es una manera para proteger a tus plantas del calor del verano. Sin lugar a dudas, el mantillo es perfecto para nuestras plantas en diferentes aspectos.
Se debe aplicar de 5 a 10 cm de mantillo alrededor de las plantas, en todo momento cuidando que el mantillo no entre en contacto con la planta en sí. Este producto ayudará a que la humedad se mantenga tras aplicar el riego.
Mueva las plantas en macetas
En caso de tener algunas plantas en macetas, durante los veranos muy cálidos debes considerar transportarlas a interiores. Si no tienes algún lugar que proteja a tus plantas del calor producido por la luz solar directa, puedes instalar alguna sombra para bloquearla. Esto evitaría que sus contenedores se sequen tan rápido durante el día.
Mantén un registro de riego.
Es importante realizar un seguimiento del riego para proteger a tus plantas del calor, y, en general, para cumplir sus necesidades. Puede que tu planta prefiera un riego directo todos los días por cinco minutos durante el calor de la mañana, en lugar de solo darle dos minutos de riego por la tarde. Llegando a ser importante averiguar bien los cuidados que requieren nuestras plantas.